Javier Alfonso
15/05/2011 - 10:54
La cartera inmobiliaria de la Caja del Mediterráneo (CAM) no deja de crecer, a pesar de sus esfuerzos por vender sus participaciones. Una de las últimas operaciones ha sido el aumento de capital en Hansa Urbana para compensar créditos.
Mientras la CAM estudia cómo deshacerse de sus activos inmobiliarios, la promotora Hansa Urbana, controlada por la familia Galea y participada por la CAM, aprobó el pasado 22 de marzo una ampliación de capital mediante compensación de créditos que supone capitalizar 40,76 millones de euros ?2,82 millones de capital y 37,94 de prima de emisión? que debía a una sociedad de la CAM. Así lo confirmó a elEconomista el secretario del consejo de administración de Hansa Urbana, Miguel Ballestar, quien no especificó cómo queda repartido el accionariado tras esta ampliación y otra, aprobada en la misma junta, por 0,85 millones con 11,41 millones de prima de emisión. Estos 12,26 millones los aportaron los socios, según Ballestar.
El capital social de Hansa Urbana antes de las ampliaciones era de 42,07 millones, por lo que la participación de la caja habría aumentado 6,2 puntos con la capitalización de créditos, y será, cuando se inscriba en el Registro Mercantil, de en torno al 30 por ciento. Además de socia, la entidad que preside Modesto Crespo era en 2009 ?últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil? la principal acreedora de la promotora con más de 100 millones de euros.
Ballestar también confirmó que Hansa Urbana compró a la CAM recientemente sendas participaciones en dos filiales mexicanas, Hansa México y Hansa Cobo. La promotora controlada por la familia Galea tiene ahora un 60 y un 40 por ciento, respectivamente, de dos de las filiales con más proyección del grupo, que ha visto como su negocio en España caía en picado debido a la crisis inmobiliaria.
En estas empresas mexicanas participan otros socios españoles, como Invernostra, filial de la caja mallorquina Sa Nostra (ahora integrada en Mare Nostrum), que tiene casi el 10 por ciento en ambas, y la familia Lladró.
Proyecto en Cancún
Uno de los proyectos de Hansa Urbana en México, el de Cancún, ha ayudado a la empresa a soportar la crisis del ladrillo en España y el parón del otro proyecto mexicano, Cabo Cortés. El proyecto Novo Cancún consta de un hotel de lujo de 250 habitaciones, nueve torres panorámicas de 20 pisos cada una y villas residenciales unifamiliares. La inversión prevista es de 300 millones.
Según el responsable de Hansa Urbana en México, Jesús Guilabert, las ventas en 2010 han superado las previsiones después de un 2009 en el que "hubo un parón importante". El proyecto se inició en 2005 y "se está vendiendo", según Guilabert, aunque "se nota la crisis y no va tan rápido como esperábamos".
México desbloquea 'Cabo Cortés'
La inyección de capital en Hansar Urbana coincidió con el desbloqueo parcial de uno de sus grandes proyectos en México, Cabo Cortés, al sur de la península de Baja California, una zona virgen de alto valor ecológico donde un grupo liderado por la promotora alicantina prevé construir 15 hoteles, una marina para 490 barcos, dos campos de golf y 8.000 viviendas.
El plan obtuvo en marzo el visto bueno parcial de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), lo que causó una fuerte contestación de organizaciones ecologistas. Según explicó a elEconomista el responsable de Hansa Urbana en México, Jesús Guilabert, "Semarnat ha puesto condiciones de tipo medioambiental que podemos y vamos a cumplir, y estamos preparando la documentación para que el proyecto siga adelante".
Según detalló Guilabert, el proyecto tiene cinco fases, la primera de las cuales supondrá una inversión de unos 100 millones de euros en infraestructura y cerca de 500 millones con la edificación, que incluirá siete hoteles, 2.500 viviendas y un campo de golf.
http://www.eleconomista.es/valenciana/noticias/3069281/05/11/La-CAM-aumenta-su-participacion-en-Hansa-Urbana-al-capitalizar-un-credito-de-41-millones.html
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